Varias investigaciones han demostrado que la dieta mediterránea tradicional reduce el riesgo de enfermedades cardíacas. De hecho, estudios recientes de más de 1,5 millones de adultos sanos demostraron que seguir una dieta mediterránea se asoció con un riesgo reducido de mortalidad general y cardiovascular, una menor incidencia de cáncer y mortalidad por cáncer, y una menor incidencia de las enfermedades de Parkinson y Alzheimer.
Por esta razón, la mayoría, si no todas, las principales organizaciones científicas alientan a los adultos sanos a adaptar un estilo de alimentación como el de la dieta mediterránea para la prevención de las principales enfermedades crónicas.
Para más información contacte con nuestro Servicio de Atención al Cliente.